Trastornos de la personalidad

Los trastornos de personalidad son patrones de conducta que habitualmente los denominamos como “anormales” debido a que no concuerdan con las expectativas sociales se manifiestan en las áreas de pensamiento, uso y manejo de emociones, relación con las personas y incapacidad de seguir las normas preestablecidas. Dichas formas de actuar suelen ser constantes, es decir, en un momento de molestia, la persona con algún trastorno, se podría quitar la ropa por completo en un lugar público y hacerlo cada vez que se enoje.

Los síntomas se presentan en la forma de actuar y en las ideas que expresan, cada uno será diferente dependiendo del trastorno de personalidad y del individuo, las más comunes son: la personalidad paranoide, esquizoide, antisocial, obsesivo-compulsivo.

La conducta de estas personas poseen consecuencias des-adaptativas, en otras palabras no pueden ser completamente funcionales, vivir en sociedad o ser autosuficientes, causa malestar a la persona que lo padece, pues deteriora la relación con su familia, amigos, trabajo y/o escuela, entre otros.

Los trastornos de personalidad se tratan con terapia psicológica y, dependiendo de la gravedad, con atención psiquiátrica. En psicología integral se otorga atención especializada para este tipo de trastornos entre muchos otros; si se llegara a detectar algún síntoma o comportamiento extraño en una persona cercana o en el individuo mismo se recomienda buscar asesoría para encontrar la forma más eficaz para tratarlos.